¡Adoptar un cachorro puede ser una experiencia emocionante! Sin embargo, introducir un cachorro en tu hogar puede ser un desafío cuando ya tienes un gatito.
Si su gato está acostumbrado a ser su única mascota, es posible que le resulte difícil adaptarse a un nuevo animal en la casa. Dado que los perros y los gatos son de naturaleza completamente diferente, les lleva tiempo descubrir cómo vivir en paz.
Los gatos, en particular, son muy territoriales. Traer un nuevo cachorro a la casa puede ser una experiencia estresante para la mayoría de los gatos. Su gato puede comportarse de manera inusual por miedo y celos.
Presentando un nuevo cachorro
La forma en que introduces un nuevo cachorro en la casa puede reducir los celos de tu gato. Una introducción lenta permite que tanto el cachorro como el gato se acostumbren el uno al otro. Para ello, coloca al cachorro en una habitación con la puerta cerrada. Dale al gato algo que huela a cachorro y al cachorro algo que huela a gato. Esto les ayuda a acostumbrarse a los olores de los demás.
Después de un día o dos, intercambia el gato y el cachorro para que puedan olfatear el área del otro. Una vez que parezcan aceptar el olor del otro, reemplace la puerta con una puerta para bebés. De esta manera, pueden verse, pero no pueden interactuar directamente.
Si alguno de ellos actúa agresivamente hacia el otro, quítelos de la vista del otro. Si el cachorro está tranquilo, elógielo por su buen comportamiento.
Una vez que acepten la vista del otro, comienza a permitirles estar juntos en la misma habitación. Supervisar las interacciones iniciales e intervenir según sea necesario. También puede proporcionarle a su gato una percha alta para ayudarlo a sentirse seguro.
Señales de que tu gato está celoso
Incluso si introduce un cachorro lentamente, un gato aún puede mostrar signos de celos. Preste mucha atención a su gatito en las semanas posteriores a la introducción del cachorro. La señal más obvia de celos es si tu gato muestra agresión hacia el cachorro, incluso si el cachorro no interactúa con el gato. Pueden silbar, morder o arañar.
Tu gato puede dañar los muebles, tirar algo de la mesa o arañar las cortinas. Si le prestas atención al cachorro, tu gato puede tratar de llamar tu atención sentándose en tu regazo o parándose frente al cachorro. Un gato muy celoso podría incluso empezar a orinar fuera de la caja de arena. Incluso si la caja está completamente limpia, es posible que tu gatito esté haciendo ruido junto a ella o rociando la pared.
Hay varias razones por las que su gato puede exhibir tal comportamiento. Es posible que no aprecien los cambios de rutina o que sientan que no reciben suficiente atención. A algunos gatos tampoco les gusta que su espacio personal sea invadido por nuevos animales, y el comportamiento destructivo los hace parecer infelices.
Ayuda a un gato celoso
La mejor manera de ayudar a un gato celoso es reconocer sus celos antes de que el comportamiento se convierta en un hábito. Una vez que te des cuenta de que tu gato está celoso, identifica los desencadenantes y encuentra una solución.
Es posible que sin querer pases más tiempo con tu cachorro que con tu gato. Para solucionar esto, asegúrate de pasar la misma cantidad de tiempo con tu cachorro y tu gato. Es posible que incluso necesites pasar más tiempo con tu gato que con tu cachorro, al menos hasta que el gato se acostumbre. Asegúrese de brindarles a los gatos y cachorros el cuidado adecuado durante esta transición. Sitios como woofbarkgrowl.co.uk pueden ayudarte a aprender cómo cuidar a tu cachorro.
Otro desencadenante es que sienten que han perdido su espacio personal. Si el cachorro se hace cargo de la casa, es posible que deba encontrar una manera de crear un espacio que sea solo para su gato. Los lugares altos que el cachorro no puede trepar son una buena solución. También puede bloquear la puerta de manera que deje pasar a los gatos pero no a los cachorros. También podría considerar ponerlos en una habitación separada por la noche para darle a su gato un descanso del cachorro.
pensamientos finales
Si tu gato está celoso de tu nuevo cachorro, no esperes que sean mejores amigos. Sin embargo, si te tomas el tiempo para asegurarte de que tanto el cachorro como el gato reciban suficiente atención y que tu gato tenga un área privada a la que retirarse, es posible que aprendan lentamente a llevarse bien entre ellos.
La información expuesto en este artículo y todo el sitio web es de tan solo de índole informativo, si necesitas información sensible respecto a tu mascota, te recomendamos que acudas con un profesional.